Hola ! ! !

existe la certeza de ser lo que nunca perdimos.
El conocimiento de la conciencia de ser
es la única Libertad que tenemos.
Adelante, están invitados. Bienvenid@s !!!
Algunas de las Imágenes que aparecen en este Blog, han sido sacadas de Internet.
Si alguien tiene derechos y quiere que no salgan en este espacio,
nos lo hacen saber y serán retiradas inmediatamente.
Mostrando entradas con la etiqueta Tensegridad. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Tensegridad. Mostrar todas las entradas
miércoles, noviembre 17, 2010
Energia y Personalidad
La energía se haya presente en todos los procesos de la vida: en el movimiento, en el sentimiento y en el pensamiento, y estos procesos pueden interrumpirse si al organismo le falta el suministro de energía necesario para realizar sus funciones básicas.
Sin embargo, no estamos acostumbrados a pensar en la personalidad en función de la energía, pero son dos valores que no pueden disociarse. La cantidad de energía que tenga una persona y la forma en que la use van a determinar su personalidad y a reflejarse en ella.
La relación de la energía con la personalidad se manifiesta más claramente en una persona deprimida. Aunque la reacción y la tendencia depresiva derivan de la interacción de factores psicológicos y físicos complicados, hay algo perfectamente claro: el individuo deprimido lo está también en su energía. Los estudios muestran que una persona deprimida sólo realiza aproximadamente la mitad de los movimientos espontáneos que efectúa el individuo no deprimido. Si el caso es grave, puede quedarse sentado inmóvil, apenas realizando movimiento alguno, como si no tuviese energía para obrar. Generalmente cree que le falta energía para seguir moviéndose. Acaso se lamente de sentirse sin fuerzas, aunque no esté cansado. La depresión de su nivel de energía se observa en la disminución de todas sus funciones energéticas. Su respiración está deprimida, su apetito está deprimido, su ímpetu sexual está deprimido. En tal estado quizá no pudiese reaccionar a nuestras observaciones de interesarse por algo: literalmente no tiene la energía necesaria para interesarse por nada.
Sin embargo, no estamos acostumbrados a pensar en la personalidad en función de la energía, pero son dos valores que no pueden disociarse. La cantidad de energía que tenga una persona y la forma en que la use van a determinar su personalidad y a reflejarse en ella.
La relación de la energía con la personalidad se manifiesta más claramente en una persona deprimida. Aunque la reacción y la tendencia depresiva derivan de la interacción de factores psicológicos y físicos complicados, hay algo perfectamente claro: el individuo deprimido lo está también en su energía. Los estudios muestran que una persona deprimida sólo realiza aproximadamente la mitad de los movimientos espontáneos que efectúa el individuo no deprimido. Si el caso es grave, puede quedarse sentado inmóvil, apenas realizando movimiento alguno, como si no tuviese energía para obrar. Generalmente cree que le falta energía para seguir moviéndose. Acaso se lamente de sentirse sin fuerzas, aunque no esté cansado. La depresión de su nivel de energía se observa en la disminución de todas sus funciones energéticas. Su respiración está deprimida, su apetito está deprimido, su ímpetu sexual está deprimido. En tal estado quizá no pudiese reaccionar a nuestras observaciones de interesarse por algo: literalmente no tiene la energía necesaria para interesarse por nada.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)